viernes, 4 de mayo de 2012

Oración del hijo desolado





Con unas cuantas desgracias del día acumuladas en su hombro, y aquella estremecedora realidad que le acongoja, el desolado hijo, da inicio a la oración de buenas noches...

¡Oh Padre!, si tan sólo tú pudieras calmar este dolor,
tengo fe de que lo harás, mientras tanto, sufro,
lloro padre mío, lloro más que el cielo 
en medio de cualquier tormenta de invierno,
lloro como niño que ha de llorarle a su madre cada vez
que lo deja en la escuelita; y entonces,
te necesito, necesito de tu presencia en mi y no tan sólo en mí, 
sino que en "él" también.


Deseo cada caricia de tu mano, que sé 
que siempre se dispone a apaciguarme,
deseo que me premies por ser ese egoísta 
que consumió el dolor de mi madre, 
simplemente por que nunca puedo dejar de amar,
entonces,deseo que se acabe, 
y que tú seas quien le cierre la puerta a "él",
(irrefutablemente mi progenitor)
para poder sentirme seguro.


Padre, si tan sólo pudiera sentirme capaz 
de superar éste que está siendo un gigante obstáculo...
...deseo por fin tener la certeza de que mi hijo 
jamás construirá una oración como ésta, por mi causa
y necesito creer, que pese a todo 
lo que "él" ha hecho conmigo, me darás el don de perdonarlo.
Buenas noches,
Amén

...En aquel momento se durmió soñando con el que sería de todos modos, su verdadero Padre.


Viaje al alma
A ti y a todo quién comprenda que finalmente, te he perdonado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Viajes